domingo, 4 de febrero de 2024

BLAZE BAYLEY. XXX ANNIVERSARY-IRON MAIDEN TOUR - SALA TOTÉM, VILLAVA/ATARRABIA, Jueves, 25-enero-2024. By PatxBlack


 BLAZE BAYLEY. XXX ANNIVERSARY-IRON MAIDEN TOUR

Artista Invitado: ABSOLVA

SALA TOTÉM, VILLAVA/ATARRABIA, Jueves, 25-enero-2024.


Pamplona/Iruña, año 1995, Sábado 18 de noviembre para ser exactos y a eso de las

10 de la noche, IRON MAIDEN se disponen a dar el segundo y último concierto hasta el

momento de su historia en la capital Navarra. Bajo el brazo traen su nuevo disco “The

X-Factor” y presentan a su nuevo vocalista, el sorpresivo Blaze Bayley, por sus

evidentes diferencias vocales con el anterior inquilino del puesto, Bruce Dickinson que

dejó la banda apenas un año antes. Se baja el telón del Pabellón Anaitasuna, lleno

hasta la bandera y con gente en la calle intentando entrar, que da una calurosa

bienvenida al nuevo cantante presenciando un autentico conciertazo de la “Doncella”

y casi 2 horas después la gente sale del recinto, salvo algunos críticos y escépticos,

bastante satisfecha con el desempeño y la energía mostrados por el señor Bayley.

A pesar de aquella actuación, corrían años oscuros para el heavy metal tradicional.

Las nuevas vertientes musicales y la mezcla de estilos dentro del rock y el metal, hacían

que grunge y Nu Metal se llevaran por delante estilos como el Thrash, el Hard/Glam o

el heavy convencional, sometiendo a muchas bandas al ostracismo, a la desaparición o

a cambios musicales para mantenerse vivos. IRON MAIDEN no fue la excepción. “The

X-Factor”, más oscuro y denso, y el posterior “Virtual XI” con algunos temas un tanto

repetitivos y faltos de frescura, más el decreciente interés por el heavy tradicional,

unido a que la voz de Bayley no aguantaba los clásicos en directo como la de Bruce,

hizo que Maiden bajara sus cotas de popularidad bastante y que a la postre, el bueno

de Blaze tuviera que coger los bartulos e irse a desarrollar su propia carrera como

solista, anunciándose la vuelta a casa de Dickinson.

Han pasado 30 años desde entonces y el “bonachon” de Blaze tiene un buen puñado

de discos y giras a su espalda, aguantando estoicamente las estocadas que han ido

dándole durante los años. Se ha sido muy injusto con este hombre, YO, el primero.

Durante años pensé que si Blaze dura un disco más en IRON MAIDEN, se carga la

carrera de la banda. Pero la realidad, es que no se puede criticar a una persona por la

elección de otra. Tal vez Blaze no era la persona indicada por voz para suplir a Bruce,

pero no se puede negar que hay que tener los huevos bien puestos para meterse en

esas botas, y sobre todo, no se puede matar a una persona por aprovechar la

oportunidad de su vida. Este que escribe, nunca tuvo nada contra la voz de Blaze, de

hecho, me gustaba bastante su banda WOLFSBANE, pero aunque me gustó bastante

de salida “The X-Factor” e incluso “Virtual XI”, nuca lo ví como el cantante que los Iron






requerían y le puse el “Sign of the Cross” al pobre Blaze tras sus 2 primeros discos,

“Silicon Meshiah” (2000) y “Tenth Dimension”(2002).

Como ya he dicho, 30 años después y tras posponer esta gira para sortear un grave

problema de salud, el amigo Blaze Bayley volvía a Pamplona, para rememorar sus 30

años desde su entrada en la Doncella de Hierro. Muchas dudas por mi parte, sobre su

voz, su estado físico, mis reticencias por lo ya contado. Tocaban a la puerta de casa.

Por suerte, varios amigos apelaron a mi ferviente fanatismo por IRON MAIDEN. Que si

ve y disfruta, que si tocan en tu casa, que si cuando vas a poder ver al cantante de esos

discos tan de cerca, que lo hace muy bien. Así que cedí a la presión y fui para allá sin

grandes pretensiones y la verdad, no puedo alegrarme más de mi decisión.

Como ya viene siendo tradición con cada concierto en la Sala Totém de Atarrabia,

cervezas previas en el Bar Tábata de Atarrabiacon la parroquia asistente al bolo y

llegamos a la Totém con los invitados ABSOLVA ya empezados.

ABSOLVA son una banda de Manchester liderada por los hermanos y guitarristas

Chris y Luke Appelton, siendo Chris además la voz principal. Practican un heavy metal

con sonido moderno pero base tradicional, un poco genérico pero con buenas

melodías y armonías en sus guitarras y sonido potente y una buena puesta en escena.

La banda, con 6 discos ya en su haber desde 2021, calentaron y gustaron al personal

que en buena afluencia, más de la esperada, ocupaba la sala habilitada hasta la mitad

de su capacidad. Se estaba bien sin apretones pero lo suficientemente poblada para

dar ambiente. Y el público los despidió con ovación.

Lo de despidió es un decir, ya que ABSOLVA además de abrir para Blaze, resulta que

es su banda de apoyo en directo, así que los hermanos Appelton, junto con Martin

McNee a los tambores y el enérgico y greñudo Karl Schramm al bajo, volvieron a salir al

escenario para iniciar los compases de “Lord of the Flies”. Antes de que empezara el

tema de verdad, aparece Blaze y se marca un Ozzy, (odio que un cantante haga esto al

inicio de un bolo) parando el tema para animar a los asistentes. Al señor Bayley no le

gustaba el poco ruido que hacíamos y así nos lo hizo saber, animándonos a subir el

volumen a su gusto. A partir de ahí, ya todo fue un conciertazo. “The Sign of the Cross”

ese ya clásico tema del repertorio Maiden, sonó majestuoso y la voz de Blaze estaba

perfecta de potencia. La banda sin querer clavar el sonido Maiden, ha hecho suyos los

temas y suenan impresionantes. Si en algún momento esperaba que esto fuese una

“tributada”, para nada. “Judgement of Heaven” y “Fortunes of War” evidenciaron dos

cosas. Una que los hermanos Appleton llevan un paso más allá las armonías típicas de

IRON MAIDEN en sus solos, doblados con excelente calidad y exquisita melodía. La

segunda es que Blaze a pesar de su voz densa y grave, llega bastante arriba y que

además tiende a aumentar la velocidad de los temas. Siempre tuvo ese componente

“speedico” desde WOLFSBANE. Pienso que será una influencia de MOTORHEAD e

incluso punk. Así pues los temas de Maiden en algunos momentos sonaban un poco





más agresivos y veloces a como los toca actualmente la banda de Harris. “Virus”, el

tema que formó parte del recopilatorio “Best of the Beast” cerró la parte dedicada a su

primera obra en la Doncella, “The X-Factor”. El sonido en Totém, inmejorable y Blaze

agradecido a su paso por Iron Maiden así como al fiel público que aún lo recuerda, se

mostro muy cariñoso y agradable con la gente, recordando en varios momentos su

actuación del “X Factour” a su paso por Pamplona en aquel lejano 1995. Pero como no

solo de nostalgia y pasado vive el hombre, Blaze anunció que también estaba aquí para

presentar su último trabajo, editado en 2021 y titulado “War Within Me”, y en tono

chistoso dijo que no pensaba dar mucho la brasa con ello, así que 3 fueron los temas

elegidos. Hablando de las continuas batallas que deben librar las personas día tras día

presento “Warrior”, seguida del tema homónimo “War Within Me” y “Pull yourself

Up”. Tres buenos temas que sin ser Iron Maiden si que siguen un poco la estela de lo

que grabó con la banda británica, con guitarras dobladas y melodías armónicas, duros

y pesados y que hacen pensar que si que hubo una etapa Blaze en la “Doncella”. Tal

vez si que Harris y cia se adaptaron a Blaze como Blaze trato de hacerlo a los Maiden

en su sonido. De cualquier forma, estos tres temas más el bolazo que se estaba

marcando la banda con Bayley al frente, hicieron que este que escribe acabara

comprando su disco en el merch posteriormente.

Pero la velada estaba lejos de acabar, y tras repasar su última obra, Blaze su puso

más comunicativo, sentimental y emotivo. Seguía recordando su etapa Maiden, le

llegaba el turno a “ Virtual XI”, su segundo y último trabajo con sus Irons. “Two Worlds

Collide” y “Lighning Strike Twice” sonaron entre chascarrillos e historietas de Blaze con

la parroquia, con sus cabalgadas marca Maiden y sus melodías muy bien hiladas por

parte de los Appleton. Como ya he dicho, en momentos sonaban más rápidas que su

versión original. Ese punto más speedico que nombraba. Encarando el final ya, turno

para “The Clansman”. Un tema soberbio, épico, un clásico de Maiden y tal vez junto a

“Sign of the Cross”, lo mejor que Blaze grabó con ellos. La peña estaba entregada ya

cantando a pulmón abierto con el patilludo frontman. Tras este temazo, Blaze anuncio

su mejor tema, “Como estáis Amigos”, en el que cuenta su experiencia después de la

guerra de las Malvinas donde tantos británicos y argentinos perdieron seres queridos y

se odiaron durante tantos años, para cuando posteriormente visitó Argentina como

vocalista de Iron Maiden, descubrió a la según él, gente más maravillosa del mundo,

que se portó muy bien con él, llegando a la conclusión de lo absurdo de las guerras.

Blaze agradeció enormemente a la gente por gastarse su dinero en música debido

como muchos músicos últimamente reconocen, al delicado momento que vive la

escena y los músicos para poder seguir girando. Bayley además, intentó en todo

momento hacerlo en el poco castellano que él mismo reconocía saber, disculpándose

por ello. Esto arrancó el aplauso del respetable. Así mismo, dijo que todo lo que

hacían, era absoluta y rigurosamente en directo, sin pistas grabadas ni trucos de micro

ni nada de nada, solo los músicos. Desde la propia sala Totém, se nos confirmo, que


Blaze fue un músico tremendamente honesto y humilde que no pidió nada en especial

para el sonido ni el escenario. Vimos y oímos su voz, sus instrumentos y luz blanca y

simple. Una delicia para los fotógrafos por cierto.

“Man on the Edge” ponía a cantar de nuevo a toda la sala y para terminar la fiesta,

“Futureal”, donde Blaze animó tanto a la gente que su guitarrista tuvo que avisarle de

que tenía que volver al micro, pudiendo comprobar entre risas del propio Blaze y los

asistentes, que era verdad que el sonido era 100% real. Entre “Oés” y vitores, Bayley y

los suyos dieron por finalizado un show en el que gente como yo, se reconcilió con este

artista, que exhausto y agotado lo dio todo pero aún así, decidió salir al Merch para

firmar y fotografiarse con todo el que se quedó a agradecerle el concierto. El hizo lo

propio firmando discos propios como de Iron Maiden y hasta joyas como vinilos de

Wolfsbane que los fans le presentaban. Por cierto, igual muchas bandas deberían

tomar nota, porque el señor Bayley vendió bastante Merch a precios bastante

populares. 10€ un Cd, 20€ una camisa chaleco firmada por él mismo. Nada de

Meet&Greed a precio de oro. Esa noche, Blaze se ganó a mucha gente y a un servidor,

lo reconcilió con su carrera. Creo que el bueno de Blaze, tal vez debido a sus recientes

episodios de salud, es en estos momentos, una persona agradecida a la vida, tanto la

que tuvo como la que tiene y mira al futuro con ganas, optimismo y transmitiendo muy

buenas vibraciones. Encima canta a enorme nivel y todo eso hace que la gente salga

contenta de sus conciertos.

Señor Blaze Bayley, Yo solo soy un desconocido fan de Iron Maiden, pero, si alguna

vez lee esta crónica, le pido disculpas por las veces que critiqué su trabajo o puse en

duda su capacidad. A fin de cuentas usted solo era una persona que vió la oportunidad

de su vida y la aprovechó todo lo que pudo. Ahora, 30 años después, ahí está su

legado, con un puñado de buenas canciones en la discografía de mi banda preferida y

algunas de ellas, auténticos himnos del heavy metal y sobre todo de IRON MAIDEN.

Solo puede uno darle las gracias.

By PATXBLACK










Cronica y fotos by Patxblack

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